En el periódico CIUDADELA MI CIUDAD que dirige el periodista Daniel Aieta, continuamente se ocupa de los temas que interesan y preocupan a los ciudadanos que vivimos en Ciudadela y es el lugar de expresión de todos los vecinos y organizaciones sociales de nuestra localidad. Siempre ha sido la voz de los que no tienen voz.
El Cabildo de Ciudadela ha encontrado en su páginas un ámbito propicio para hacer conocer sus continuos reclamos, posturas y novedades. En sus distintas publicaciones se puede leer todo lo publicado en este blog o en nuestra página.
El Cabildo de Ciudadela ha encontrado en su páginas un ámbito propicio para hacer conocer sus continuos reclamos, posturas y novedades. En sus distintas publicaciones se puede leer todo lo publicado en este blog o en nuestra página.
EDITORIAL DEL MES DE AGOSTO
EL PODER POLITICO Y EL CABILDO DE CIUDADELA
Son legendarios los reclamos que los integrantes del Cabildo de Ciudadela vienen realizando a las autoridades municipales, provinciales y nacionales en beneficio de dotar a nuestra ciudad de soluciones que muchas veces desde este medio compartimos, porque creemos que son todas ellas positivas.
También saben ellos que quien escribe estas líneas, supo discrepar y discutir algunos temas o las prioridades de estos en forma frontal y sincera, pero si de concepto se trata sobre estos vecinos, mi ética personal y profesional me dice que son “impecables ciudadanos, honestos en su diario trajinar, hacedores de hechos en beneficio de Ciudadela, que nunca cobraron un centavo por sus obras y que más de una vez sacaron dinero de sus bolsillos por causas que atañen a todos y trabajaron en obras que hoy se ven plasmadas en el ciudad, -muchos de ellos en instituciones, - con lo mejor que tienen – una inquebrantable voluntad solidaria, siendo la única política ejercida, la vecinal, sin ideologías o partidismos”
Esto no es un brote cabilístico, (no todo lo contrario), es defender a un grupo de vecinos nada más que por su honestidad de tantos años de Ciudadela, ante algunos ataques y cometarios de personajes que llegan hasta el intendente de rodillas y que jamás le dicen la verdad por miedo a su mediocre accionar... y también por honrar la memoria del querido Hugo Caramelo.
Dice un refrán popular repetido en muchas ocasiones por mi querido viejo antes situaciones parecidas... “El ladrón ve ladrones, el traidor ve traidores” y agregaría que el mentiroso y mediocre, cree que todos también son como él.
EL PODER POLITICO Y EL CABILDO DE CIUDADELA
Son legendarios los reclamos que los integrantes del Cabildo de Ciudadela vienen realizando a las autoridades municipales, provinciales y nacionales en beneficio de dotar a nuestra ciudad de soluciones que muchas veces desde este medio compartimos, porque creemos que son todas ellas positivas.
También saben ellos que quien escribe estas líneas, supo discrepar y discutir algunos temas o las prioridades de estos en forma frontal y sincera, pero si de concepto se trata sobre estos vecinos, mi ética personal y profesional me dice que son “impecables ciudadanos, honestos en su diario trajinar, hacedores de hechos en beneficio de Ciudadela, que nunca cobraron un centavo por sus obras y que más de una vez sacaron dinero de sus bolsillos por causas que atañen a todos y trabajaron en obras que hoy se ven plasmadas en el ciudad, -muchos de ellos en instituciones, - con lo mejor que tienen – una inquebrantable voluntad solidaria, siendo la única política ejercida, la vecinal, sin ideologías o partidismos”
Esto no es un brote cabilístico, (no todo lo contrario), es defender a un grupo de vecinos nada más que por su honestidad de tantos años de Ciudadela, ante algunos ataques y cometarios de personajes que llegan hasta el intendente de rodillas y que jamás le dicen la verdad por miedo a su mediocre accionar... y también por honrar la memoria del querido Hugo Caramelo.
Dice un refrán popular repetido en muchas ocasiones por mi querido viejo antes situaciones parecidas... “El ladrón ve ladrones, el traidor ve traidores” y agregaría que el mentiroso y mediocre, cree que todos también son como él.
Daniel Aieta